martes, 28 de noviembre de 2006

Un súper neuquino prohíbe la entrada a gitanos

Ocurrió dos veces en poco más de un mes. Una gitana quiso comprar en un local y los guardias se lo prohibieron con una única razón: "Hemos sufrido muchos robos por parte de gitanos y el dueño decidió que no entren más". Ejemplo extremo, pero no aislado, de una discriminación que tácita o explícitamente se advierte hacia esa comunidad. Hay gente que se cruza de vereda al verlos, miradas de reojo y desconfianza o comerciantes que deciden no atenderlos. "Si querés llamalo discriminación, para nosotros es cuidar lo nuestro", dice el dueño del supermercado. Actúan el defensor del Pueblo y el Inadi.
NEUQUEN (AN).- "Disculpen pero en este negocio no pueden entrar más gitanos, no es contra ustedes, no tenemos nada contra ustedes, pero no pueden entrar porque la orden es que no entren más gitanos".
-¿Se puede saber por qué?
-Bueno, lo que pasa es que hemos sufrido muchos robos por parte de gitanos y el dueño decidió que no entren más gitanos.
-Pero nosotros nunca te robamos ¿no nos conocés?... siempre vinimos acá y nunca nos llevamos nada.
-Esa es la orden que tengo, pero no es contra ustedes.
A este diálogo usted puede sumar gritos y alguna mala palabra, todo sazonado con decena de miradas clavadas sobre dos muchachas de vestidos de gasa, largos y furioso colorido.
El hecho se produjo el 11 de octubre en el acceso al supermercado Capriolo, un clásico comercio neuquino y desde ese día y durante un mes Gabriela Miguel, una gitana nacida y criada en el barrio Villa Florencia, dejó de salir a la calle. "Me moría de vergüenza, nunca había pasado por algo así", recordó.
Gabriela, de 25 años, lo remarca: "Nunca en la vida pensé que mis vecinos podían discriminarme así". "En el 2001, cuando se dio esa locura de los saqueos, fuimos casi todos los vecinos y fui con mis sobrinos para frenar el saqueo que querían hacerle. Tengo 32 años viviendo en Neuquén, todos me conocen; Américo (el dueño del supermercado) me conoce, conoce a mi esposa ¿qué problema ha tenido él conmigo o con mi familia alguna vez? nunca ningún problema", cuenta, pregunta y se enoja Carlos "El Chaqueño" Miguel, el padre de Gabriela, Silvia y Karina. A dos de ellas se les impidió ingresar al supermercado el 11 de octubre pasado.
"Yo te digo, desde que mi viejo vino acá, hace 30 años, siempre hubo problemas con los gitanos; antes armaban las carpas acá enfrente y entraban de a cuatro o de a cinco y se llevaban hasta lo más increíble. Yo con la chica (Karina) todo bien, la conozco de la escuela y la saludo siempre, todo bien, pero tuvimos que tomar una decisión porque acá lo único cierto es que los gitanos nos robaron siempre y este local está hecho a pulmón y si te llevan un yogurcito aunque sea, te están haciendo un agujero así de grande", explica con las manos Sergio Capriolo, uno de los propietarios del comercio ubicado en el barrio Limay.
El jueves, minutos antes de diálogo con Capriolo, un guardia frenó el ingreso de Karina, Gabriela y Silvia.
-Eso fue es un acto de discriminación -le advirtió este diario a Capriolo.
-Si querés llamarlo así, llamalo así, para nosotros es cuidar lo nuestro, tenemos que responder por 48 empleados y no te
nemos capacidad para que los guardias sigan a cuatro o cinco personas por el local. Ahora se la agarraron con nosotros pero esto pasa en otros lados, hay muchos lugares que no quieren a los gitanos -se defendió.

Rechazo y adhesiones

El caso, que se hizo público a través de una carta de lectores publicada por este diario, cosechó rechazos y adhesiones y la apertura de un expediente en la Defensoría del Pueblo de Neuquén. Es que al cabo de un mes, Gabriela Miguel decidió hacer pública la situación. Su hermana Karina, que es abogada, la apoyó en la iniciativa.
"Una vez, en una pizzería de acá, tampoco querían atender a las pibas. Me lo fui a ver al tipo, porque lo conozco y me dijo que lo disculpe, que no sabía que eran mis hijas. Yo lo miré y le dije ¿Necesitabas saberlo?", cuenta lo que dijo aquella vez "El Chaqueño".
"El Chaqueño" Miguel -cuya altura casi llega al metro noventa- es un conocido vendedor de repuestos y de autos, claro. Es descendiente de turcos y alemanes, un argentino bah. Pero, esencialmente, el hombre es gitano. Y está orgulloso de serlo. "Las pibas son mi vida", dice y busca un cigarrillo que lo salve de las humedades.
La charla es en la mesa de su casa en la calle Luis Beltrán y junto a Carlos está Karina, una de sus hijas mayores. La chica debería estar en el libro Guinness: es la primera gitana abogada de la Argentina.
Para lograr que su hija estudie Derecho, Carlos tuvo que plantarse ante una comunidad que en Neuquén orilla los 1.200 integrantes. A la mayoría de los gitanos les alcanza con que sus mujeres sepan firmar.
El 11 de octubre pasado Karina estaba dentro del supermercado pues iba adelante y vestía como criolla. Eso bastó para que nadie la frenara. Karina no se calló, pero tampoco fue violenta.
"Fue terrible. Yo le pregunté a Sergio ¿Los gitanos son los que únicos que te roban? Ah no, no son los únicos...entonces prohibile la entrada a los criollos y bajá la persiana. Yo soy gitana y me dejaste pasar porque me visto como criolla ¿eso me hace menos sospechosa que mis hermanas?" "Uno de los empleados me dijo que me ponga ropa de criolla y listo, que no pasa nada, por más que me vista de criolla sigo siendo gitana y para ellos seguiría siendo ladrona. Es muy feo lo que pasa ¿sabés lo que es que vayas pasando y que las madres tiren de sus hijos para que no pasen al lado tuyo?", se indigna Silvia, de 29 años.
Sergio Capriolo fue elocuente en su postura. "¿Y cuando vas al boliche?, nunca te pasó ver a gente a la que no dejan entrar, esto pasa siempre y acá se hizo por la reiteración de robos, porque no queremos más problemas, preguntá a la gente quiénes somos nosotros".

RODOLFO CHAVEZ

1 comentario:

P A M dijo...

ESTAAAAN RE LOCOS, YO SOY GITANAAAA. Y AHORA VOY A DISCRIMINAR COMO USTEDES. "NO VOY A DEJAR PASAR A MI NEGOCIO A LOS MAPUCHES DE NQN! sucios. Lo peor sabes que? QUE AHORA COMO NO DEJAN PASAR A NINGUN NEGOCIO A GITANOS, LES VAN A ROBAR LOS CRIOYOS AHORA PORQUE SON UNOS TIRADOS, CUALQUIERA LES PUEDE ROBAR Y PEOR PORQUE LOS CRIOYOS SON PEOR! PERO ME CAGO EN USTEDES, VOY A IR A SU LOCAL SOY GITAANA Y VOY A IR VESTIDA DE CRIOYAS! PUTOS MAPUCHES!